El peligro de colocar una placa de alarma falsa

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multa por poner pegatina alarma sin tenerla

El uso de carteles disuasorios es un práctica extendida y peligrosa. Analizamos todo lo relacionado con legalidad, los tipos de placas, las diferencias entre los falsos y verdaderos.

Todo lo que necesitas saber sobre las multas por poner pegatinas de alarma sin tenerla

Si estás pensando en colocar una sin tener instalado un sistema de seguridad homologado, es importante que conozcas los riesgos legales que esto implica.
En España, esta práctica puede derivar en una sanción económica, ya que las autoridades regulan este tipo de acciones para evitar fraudes y garantizar la seguridad ciudadana.

¿Por qué te pueden multar por poner una placa o cartel de alarma sin tenerlo?

Este hecho se puede considerarse un intento de engañar a terceros, haciendo creer que una propiedad está protegida cuando en realidad no lo está.
Según la normativa vigente, esto podría interpretarse como publicidad engañosa o incluso como un incumplimiento de las regulaciones locales de seguridad.

Legislación sobre sistemas de alarma

En muchas comunidades autónomas, las empresas de seguridad homologadas deben registrar los sistemas de alarma en los cuerpos policiales correspondientes. Por tanto, usar una pegatina de una empresa de protección sin contratar sus servicios puede acarrear sanciones por incumplir estas normativas.

Multas por usar pegatinas falsas

Las sanciones pueden variar dependiendo del lugar y la normativa local, pero suelen rondar entre los 300€ y 3.000€, dependiendo de la gravedad y la reiteración de la infracción.

¿Qué alternativas existen para proteger tu hogar o negocio?

En lugar de recurrir a pegatinas sin respaldo, es más efectivo y seguro optar por un sistema de alarma homologado.

Las ventajas de un sistema real incluyen:

  • Respuesta inmediata: Conexión directa con CRA.
  • Efecto disuasorio real: Protege tu propiedad con tecnología avanzada.
  • Cumplimiento legal: Evitas sanciones y operas de acuerdo con la normativa.

Si estás buscando soluciones similares, te ofrecemos equipos y dispositivos personalizados para proteger tu hogar o negocio con sistemas certificados y homologados.

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¿Qué es un cartel de alarma disuasorio?

Se trata de un distintivo que incorporan las empresas de seguridad para alertar de la presencia de un dispositivo en una propiedad. Muchas veces se colocan para simular que una propiedad está protegida por un sistema de protección cuando no lo está.

Colocar un cartel de alarma cuando no hay un servicio de seguridad contratado es ilegal.

Las viviendas y negocios que usan este tipo de distintivos buscan evitar robos porque, en teoría, hacen creer a los ladrones que hay un equipo y dispositivos de protección instalados.

En los siguientes apartados explicamos los peligros de usar pegatinas disuasorias de alarma en lugar de un sistema de seguridad real y cómo pueden incentivar el robo en nuestra propiedad.

Diferencias entre carteles de alarma reales y falsos

La única forma de conseguir uno real y legal es a través de la instalación de alarmas para casa. Para evitar fraudes y saber identificar los que son falsos hemos analizado las características de las placas reales.

Pertenecen a empresas de seguridad y tienen los siguientes elementos:

  • El nombre de la empresa.
  • El número de teléfono.
  • El logo de la compañía.
  • La página web de la empresa.
  • El número de autorización de la dirección general de policía (DGP).
  • Algunas compañías añaden los servicios que incluyen, vigilancia 24h, respuesta inmediata...

La mayoría de los carteles en los que no se especifica la empresa que ofrece los servicios de seguridad, actúan como pegatinas disuasorias falsas.

¿Cómo comprar una cartel de alarma falso?

Son muchas las webs que venden placas disuasorias asegurando una protección real de tu casa o negocio.
Sin embargo, la realidad es muy diferente, ya que los ladrones saben diferenciar entre los que son verdaderos y los falsos.

Se pueden comprar este tipo de pegatinas en páginas como Amazon o Ebay, pero desaconsejamos hacerlo.

Los vendedores defienden el uso de estas placas de alarma falsas, en muchas ocasiones ilegales, alegando que son la primera barrera ante el robo o que hacen que los ladrones se lo piensen dos veces.

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¿Dónde se coloca un cartel de alarma?

Si tu pegatina ha sido adquirida por comprar un servicio de protección, seguramente no te tengas que plantear esta pregunta, pues la colocación de la placa y sus dispositivos corre por parte de la empresa de seguridad contratada.

La recomendación es colocarlo siempre en un lugar visible, como puede ser la fachada o la puerta de la vivienda o negocio protegido (o presumiblemente protegido).

Lo mismo ocurre con las pegatinas de alarma que suelen incluir las empresas de seguridad; se colocan en puertas o ventanas, las principales vías de acceso al interior.

Tipos de carteles disuasorios y placas de alarma falsas

Hay gran variedad de y cada uno tiene unas particularidades. Algunas no son fáciles de encontrar, ya que su venta y distribución es ilegal.

Los diferentes tipos son:

  • Falsificaciones de carteles de alarma: son prácticamente iguales a los de las empresas de seguridad. Crean la apariencia de que esa empresa ha instalado un sistema de protección para su propiedad.
  • Carteles disuasorios sin alusión a una empresa de seguridad: éstos simplemente informan que la propiedad está siendo protegida por un dispositivo, cuando en realidad no es cierto, no nombran a ninguna empresa y sus diseños son originales.
  • Carteles verdaderos colocados de forma fraudulenta: generalmente son robados a la empresa de seguridad.

Conociendo los diferentes no reales que usa la gente, se entienden algunos de los peligros que conlleva su uso, no obstante, detallamos todas estas desventajas en el siguiente apartado.

Si necesitas más información sobre este tema y cómo conseguirlos verdaderos, llámanos y te ayudamos en el proceso.

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Los peligros de colocar una placa falsa de alarma en una vivienda

Supone un peligro real para el vendedor, el comprador e incluso la propiedad protegida.

El primer peligro de los carteles disuasorios es que no son una protección efectiva ya que los ladrones profesionales son capaces de identificar las falsificaciones y comprueban más aspectos de la vivienda para averiguar si hay un sistema de seguridad instalado.

Las placas falsas en la mayoría de las ocasiones, no cumplen su función disuasoria e incluso incitan al robo al saber que no hay un equipos ni dispositivos conectados.

Cuando se trata de falsificaciones o incluso de carteles robados de una empresa de seguridad también corremos el riesgo de que nos acusen por un delito contra la propiedad industrial o intelectual.

Tanto las propias placas como sus diseños, son propiedad de la compañía y estas prohíben expresamente su venta y distribución.

Empresas de seguridad como Securitas Direct, Prosegur o ADT son conscientes del uso fraudulento de sus carteles y tienen protocolos de actuación para detectar y denunciar esta situación.

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